La voz
La voz es el vehículo de la comunicación por antonomasia. Va íntimamente ligada a nuestras emociones. Con la voz nos exteriorizamos. La voz es una manifestación de aquello que somos por dentro, tanto a nivel biológico como psicológico. Una voz de calidad requiere que el conjunto de órganos que configuran el aparato fonador accione sinérgicamente (combinadamente). Esto se producirá si se dan ciertas condiciones anatómicas y fisiológicas las cuales requieren, además, un buen equilibrio psicológico, neurovegetativo y nervioso, a la vez que una correcta regulación hormonal.
La voz no es, pues, un fenómeno aisladamente, sino que es un órgano altamente interrelacionado con diversas organizaciones vecinas y alejadas. El resultado final de la voz es comparable a una sinfonía ejecutable a ejecutada por un sin número de músicos cuyo director es el cerebro. Pero la "afinación" de todos los instrumentos no siempre se consigue; entonces, es preciso saber qué instrumento es el causante de la disfunción y tratar de devolverlo a la normalidad [32].
El tono
Las normalidades en el tono se asocian frecuentemente a muchos procesos patologías. La percepción del tono está relacionada de forma compleja con la intensidad y las características espectrales del sonido vocal. La frecuencia fundamental (F0), que viene determinada por la frecuencia de la vibración de las cuerdas vocales, es el factor más importante que contribuye al tono que percibimos. De todos los datos clínicos relacionados con la voz, la F0 es el más frecuentemente hallado por su facilidad de determinación por medio de instrumentos computarizados y por la información de utilidad que nos brinda acerca del estado y comportamiento de las cuerdas vocales.
Para evaluar la extensión total de la voz se obtiene:
El tono más grave, mandando contar de 1 a 25 mientras se baja progresivamente el tono en cada número enunciado.El tono más agudo, cantando la escala hacia arriba incluyendo el falsete. Se debe repetir al menos tres veces.
El tono óptimo: es el nivel de tono en el cual la voz se produce de un modo más eficaz, con la menor tensión laríngea y con la máxima comodidad.
El tono habitual o frecuencia fundamental (F0): se determina para saber si se usa el tono que le corresponde según su edad y sexo. Si difiere dos o más tonos del tono óptimo debe iniciarse una terapia vocal para modificarlo [33].
El Ritmo
Nada aburre más que la ausencia de ritmo y entonación en la expresión oral.
¿Cómo es su ritmo al hablar? ¿Varía de acuerdo con las situaciones? ¿Con cuáles situaciones?
Dos ejemplos de la alteración del ritmo del lenguaje los encontramos en las manifestaciones de los estados de tensión nerviosa, al hablar en público, y en algunos problemas del lenguaje, como la tartamudez. En estos ejemplos lo que se observa es una alteración de la fluidez verbal, también llamada disfluencias. Las disfluencias se caracterizan por presentar un lenguaje telegráfico, presencia de alargamientos, prolongaciones y bloqueos de la expresión oral. Nada más observe a quienes tienen miedo de hablar públicamente, o tal vez ¡Obsérvese a sí mismo(a)! [34].
La intensidad emocional
La intensidad es el grado de fuerza con que se emite una voz (fuerte o floja). Se mide en decibelios. La intensidad de la voz humana depende, entre otras cosas, de las estructuras del aparato fonador y del buen uso que hagamos de él. Cada uno de nosotros tenemos unas posibilidades vocales que, generalmente, no están desarrolladas. El desarrollo se adquiere mediante la técnica vocal. Y el nivel que se alcance depende de la exigencia de cada alumno, siempre dentro de sus posibilidades [35].
Lectura en voz alta
Leer es una actividad compartida entre niños y adultos. Los niños pueden aprender mucho sobre el lenguaje al escuchar a sus padres y abuelos, por esos es importante la lectura en voz alta.
En este tipo de lectura se han dominado todos los mecanismos de la lectura y se ha desarrollado la capacidad de leer un texto con exactitud y rapidez. Los niños deben de aprender a leer las palabras rápida y correctamente para poder entender lo que se está leyendo, además al ritmo de lo que se lee.
Cuando los padres leen en voz alta, los niños aprenden rápidamente que un libro es una puerta a las más asombrosas aventuras de la imaginación [36].
Comprensión de lectura
Lectura y comprensión de la lectura forman una entidad indivisible, desde el punto de vista de la teoría sociolingüística. Si no hay comprensión, no hay lectura, sino solamente una emisión de fonemas relacionados con los gafemas correspondientes. Por lo tanto, el desarrollo de la comprensión lectora es un tema de estudio que ha sido largamente debatido, tanto por la complejidad que reviste como por la trascendencia que alcanza en el desarrollo intelectual de la persona.
La comprensión de la lectura constituye un componente de la capacidad de comprensión general del sujeto. Se desarrolla en la medida en que se perfeccionan habilidades específicas, a través del proceso de enseñanzas- aprendizaje.
Moore (1980) enfoca el desarrollo de la comprensión lectora como el desarrollo de una serie de destrezas tratadas como tareas jerárquicas de aprendizaje [37].